Kansas City Southern (KCS) completó su venta a Canadian Pacific Railway (CP), con lo cual nace la ferroviaria más grande de Norteamérica en términos de ser una sola línea que conectará a México, Estados Unidos y Canadá con ingresos anuales aproximados de 8 mil 700 millones de dólares. Solo falta una aprobación de la Junta de Transporte Terrestre (STB, por su sigla en inglés) de Estados Unidos.

Esto traería consigo la creación de Canadian Pacific Kansas City Limited (CPKC) y con ello la puesta en marcha del también denominado “ferrocarril del T-MEC”; sin embargo, se espera que esto se complete hasta los últimos tres meses del próximo año.

​La fusión de la compañía traerá consigo un ferrocarril con una extensión de aproximadamente 32 mil kilómetros que atravesará México, Estados Unidos y Canadá que aprovechará todos los beneficios del tratado entre los tres países, el T-MEC.

La combinación traerá consigo nuevas opciones de competitividad para envíos intermodales, en donde resultarán beneficiadas, principalmente, industrias como la automotriz y agrícola. Estas dos ramas representan un intercambio comercial entre los tres países por 189 mil 944 millones de dólares, según datos de la Secretaría de Economía.

Para la compra, los inversionistas de KCS recibirán 2.884 acciones ordinarias de CP y 90 dólares en efectivo por cada acción ordinaria de Kansas que posean, así como 37.50 dólares en efectivo por cada acción preferente. En total, la transacción representa un valor de 31 mil millones de dólares, misma que fue anunciada a mediados de septiembre. 

Después del cierre de la adquisición, las acciones de KCS fueron colocadas en un fideicomiso con derecho a voto con Dave Starling, expresidente y director general de esta empresa. Dicho fideicomiso, el cual garantiza que KCS operará de forma independiente de Canadian Pacific, permanecerá vigente hasta que el regulador estadunidense emita su decisión sobre la solicitud conjunta de control ferroviario de las empresas.

Keith Creel, presidente y director general de CP, dijo previamente que al combinarse ambas empresas ferroviarias se desbloquearía el potencial de sus redes, lo que conllevaría un mejor servicio a todas las industrias.

“Nuestro camino hacia este acuerdo histórico solo refuerza nuestra convicción en esta asociación única en la vida… Esta perfecta combinación de extremo a extremo crea la primera red ferroviaria de Estados Unidos, México y Canadá con nuevas ofertas de una sola línea que brindarán un alcance de mercado drásticamente ampliado, proporcionarán nuevas opciones de transporte competitivas y respaldarán el crecimiento económico de América del Norte”, agregó el directivo.

Por su parte, Patrick J. Ottensmeyer, presidente y director general de KCS, resaltó que dicha unión traerá un valor aún más elevado al transporte de mercancías, en donde también habrá beneficios para la empresa de la región Norteamérica.

“La combinación CP-KCS no solo beneficiará a los clientes-socios, laborales y accionistas a través de nuevos servicios de transporte de línea única, sinergias atractivas y rutas complementarias, sino que también beneficiará a KCS y a nuestros empleados al permitirnos formar parte de un corporativo verdadero y en crecimiento, del continente de América del Norte”, suscribió Ottensmeyer.   

Creel aseveró que es un día histórico para las dos compañías porque CPKC se convertirá en la columna vertebral que conectará a todos sus clientes de la región, mejorará la competencia de EU e impulsará el crecimiento económico en América del Norte.

Fuente: Milenio